Recogemos la noticia publicada recientemente en la sección de educación del Diario El Mundo sobre la normativa incluida en el nuevo decreto para regular la convivencia en centros públicos y concertados de la Comunidad de Madrid, recientemente aprobado por el Consejo de Gobierno, aunque su aplicación no será obligatoria hasta el próximo curso. Con la nueva normativa los alumnos tendrán que “comunicar al personal del centro las posibles situaciones de acoso que puedan poner en riesgo grave la integridad física o moral de otros miembros de la comunidad educativa que presencien o de las que sean conocedores”. En caso contrario, estarían incurriendo en una “falta grave”, que puede conllevar la expulsión del centro durante varios días. La noticia irrumpe en pleno debate sobre el acoso escolar tras el reciente suicidio de un menor en Madrid, que, según las primeras investigaciones policiales sufría este tipo de violencia. Asimismo, en la edición del domingo de este mismo diario se publica el caso de otro menor que intentó suicidarse en plena clase, el cual parece que podría estar sufriendo bulling por parte de algún compañero, aunque aún no se pueden descartar otras hipótesis.